martes, 17 de julio de 2018

¿Qué estamos haciendo mal?


Llevo tiempo planteándome o cuestionándome que estamos haciendo mal ¿y a qué hago referencia? Pues hago referencia a la formación de las generaciones venideras en nuestro gremio. No puedo hablar de sala apenas, pues además de no ser un experto, la falta de personal de prácticas me dice que está (de momento) en un grave problema respecto gente formada y pasional. Ahora, todos quieren ser chefs.

Me preocupa enormemente los valores que se inculcan (además de que son la generación Nini y/o Milennians y eso lo dificulta todo), las verdades que no se cuentan, las mentiras que mantienen esos castillos de naipes, y por supuesto, todo lo básico que se debería enseñar antes de llegar a determinados puntos.

Por ejemplo, y seguro que muchos me entenderéis, ¿es razonable que a estas alturas de la película yo (y al decir yo me refiero a todo el equipo) tenga que enseñarle a barrer a una persona???????? ¿es razonable que alguien que viene de estudiar y está haciendo unas prácticas le tenga que enseñar que es un FIFO o una rotación de stock?????? ¿es razonable que tengamos que poner la primera semana de prácticas (si no es más) en el office porque si no, no le pegan ni un empujoncito a la bandejas del fregado???? Y bueno, empatía con la o las personas del office, mejor ni hablar.

A todo esto, hay que sumarle esa constante actitud de: es queeeee, yo penseeeeeeé, yo creíaaaaa, y una larga lista de excusas que anulan un OÍDO y listo.

Del ritmo y la iniciativa, casi mejor no hablar, parece que les pesan los pies y manos, no entienden eso de  “Vuela que estamos en la mierda”!!!! o “venga que nos pilla el toro”!!! No asimilan que no están en la escuela y ya no es un juego, esto es real y no me puedes hacer perder el tiempo ni puedo permitir que mi calidad se vea afectada por tu falta de actitud, de hecho, ya no dejamos que entren en servicio hasta que se lo ganen, solo producción. De hecho, y pudiera parecer evidente (aunque no lo es tanto), que las personas de prácticas que vienen porque quieren aprender sin depender de ninguna escuela o institución, son muchísimo más efectivos y receptores al aprendizaje y exigencias del lugar, haciendo, que poco a poco, el filtro o embudo de admisión se estreche cada vez más.

La otra cuestión son los temarios, temarios en muchas ocasiones anticuados (que no digo que haya cosas que no se tengan que aprender, pero hay otras muchas que de verdad son arcaicas y son una verdadera pérdida de tiempo, como por ejemplo, montar una mayonesa con varilla) y otros que se saltan lo básico (por exigencias de alumnos, padres pagadores, etc) para ir directamente a las “espumas y esferificaciones”. ¿Quién hace o formula esos temarios? ¿Quién regula y corrige esos temarios en las delegaciones públicas? Y los más importante, ¿con qué criterio se selecciona al profesorado y equipo de formación? Y la verdad, con esta última pregunta tengo parar despacharme a gusto, y aquí, siento si molesto a alguien, pero así es como están las cosas, y no digo que todos los profesores sean como voy a decir ahora, pero que hay muchos, sí. Resulta que en la privada,  sin muchos requerimientos y por ser amigo de, o por salir en un programa de, o porque en algún momento hizo algo en cocina profesional, tenemos una cantidad de supuestos formadores terribles, que no han ejercido ni 10 añitos y ya se permiten forman, enseñando año tras año el mismo temario con algunilla actualización que otra de alguna técnica. Y ya de la pública, mejor ni hablar, porque eso de que alguien que haya estudiado educación física (por ejemplo) y que tenga más puntos que yo por el simple y mero hecho de que ha estudiado una carrera, es para cagarse; que no ha pisado una cocina en su vida, eso da iguaaaaaal, tampoco es tan importante!

Y luego esté esa otra parte, que es cojonuda por parte de las instituciones. Las de los seguros y sus horarios. Resulta que nuestro trabajo se centra en horarios de almuerzo y cenas, y por supuesto los fines de semana. Se supone que las prácticas son para que APRENDAN A TRABAJAR, NO A COCINAAAAAAR!!! Pues no, te llegan de la escuela (hay que decir que esto sobre todo es cuando vienen de las públicas) y te dicen: El horario de prácticas es de lunes a viernes en horario lectivo, es decir, de 8:30 a 14:30, porque fuera de ese horario el seguro no les cubre. PERDONAAAAAAAAA??? ¿Cómo carajo quieren que les enseñemos a trabajar si no están cuando y cuanto hay que estar para aprender? Y aquí vuelvo a lo de las mentiras, porque ese horario es una falsa y una gran irrealidad, habrá quien consiga ese horario, pero en esta profesión, serán los menos.

En fin, creo que estamos haciendo muchas cosas verdaderamente mal, y lejos de conseguir y llegar a donde se quiere, seguirá siendo la formación mejor a base de echarle narices y teniendo suerte de encontrarse buena gente en el camino dispuesta a aportar su granito de arena.

Feliz semana a tod@s y mucha paciencia!!!!

domingo, 8 de julio de 2018

Deja de pintarlo como no es


Hola a tod@s,

Hoy escribo porque llevo varios días encontrándome con cosillas curiosas en las redes, especialmente en el face, y que sinceramente, me parecen patéticas.
Por ejemplo, me encuentro una imagen de una cocina y dos cocineros “super chupi guays”, y tiene como leyenda:
“Cocinero
No eres chef por saber cocinar muy bien, o por terminar la carrera de gastronomía. Serás chef cuando comandes y seas líder en una cocina”.
Cágate lorito!!!! Pero lo peor de todo no es eso, es que para más INRI, tiene 2495 likes y ha sido compartido 5117 veces (datos reales que tengo ahora mismo delante)!!!! Fliping in colors por los cuatro “costaos”!!!

Y bueno, algunilla más, pues por ejemplo uno enalteciendo a los cocineros (que también se agradece, pero según como) como seres que se encuentran en otro plano y un largo etc de sandeces y frikadas varias.

Bueno, pues mi opinión y para empezar desde el principio, creo que lo primero es clasificarnos en dos grandes grupos, los vocacionales y los no vocacionales, y en este segundo grupo estamos los que hemos descubierto un mundo que nos ha enganchado por completo (pero no somos vocacionales y por tanto es posible que lleguemos a cambiar de profesión) y al que las circunstancias y la necesidad lo han llevado a dedicarse a esto.

Bien, dicho esto ¿creéis que tod@s l@s cociner@s tienen la misma pasión, resolución, responsabilidad, capacidad de reacción y un largo listado de cualidades y/o defectos? Lógicamente NOOOOOO!

Pues ahora, habiendo diferenciado bien (según mi punto de vista) los distintos grupos ¿qué es lo que nos diferencia del resto de seres terrenales? Bueno, antes de seguir, decir que “en todos lados se cuecen habas”, y por lo tanto, cada gremio tendrá lo suyo. Pero lo que sí es cierto y verdad, es que lejos de ser super héroes y heroínas como algunos se empeñan en aparentar o hacer ver aportando un falso e incorrectísimo glamour a nuestra profesión, somos currantes como pocos (que sí, que hay de todo, por supuesto, y que la cosa cada vez está más jodida para encontrar gente buena, también) y que nos vemos sometidos a una serie de circunstancias que muchas personas serían y son incapaces de soportar.

¿Cuáles son esas circunstancias? Jornadas interminables, tanto diarias como semanales, siendo una jornada semanal corriente de 60 h, y por supuesto, ni un fin de semana libre, lo que conlleva perder el 90% (si tienes suerte y te va bien) de tus amistades de toda la vida y perderte la inmensa mayoría de eventos familiares (que a veces es una excusa cojonuda para escaquearte de compromisos que no te apetecen absolutamente nada) y por supuesto, la crítica de todos ellos porque no quieres saber nada de la familia.

A todo esto hay que sumarle tener una actividad en contra reloj constante, nunca estás en place, siempre hay cosas que hacer y te pilla el toro. Yendo todo el día a este ritmo, está el momento servicio, que pasas de ir corriendo en modo maratón a modo sprint, sales de currar y llegas a la 1-2 de la madrugada a casa ¿y ahora qué? ¿Quién para ahora esa cabecita? Pues eso, que encima no tenemos narices de dormirnos por lo menos pasada 1 hora, y muchas veces hasta 2 (este es uno de los motivos por los que siempre en la profesión ha habido alcohol y otras cosillas para “relajarnos”).

Y diréis ¿por qué llegáis con la cabeza así? Pues como decía, pasamos a modo sprint, donde las comandas comienzan a entrar, no quieres que tus comensales tengan que esperar, tienes que resolver los contratiempos que sucedan (que siempre los hay por muy preparado que estés, no lo dudes) como alergias y gustos, algo que se te ha echado a perder, algún equipo que falla, alguien que se ha dado de baja, y un sinfín de cosas que pueden ocurrir en esas 2 ½ - 3 horas de servicio, y todo eso sacando platos con la mayor calidad y estándar posible para alcanzar la meta final que es la satisfacción del cliente.

Y luego está nuestra parte física, esa en las que las varices por tantísimas horas empiezan a joder, dolores de espalda por la postura tan constante, cortes que te envuelves en papel y luego irás al médico, si es que vas,  (o vas al médico, te cogen 5 puntos y te vuelves al curro automáticamente), quemaduras de todo tipo, callos en los callos, problemas de artrosis a largo plazo por los cambios de altas tª a tª de congelación, y bueno, mil cosas más.

Todo esto con sueldos normalmente insultantes, y no por culpa de los empresarios (que en ocasiones sí), sino de los propios consumidores que no piensan en el trabajo que hay detrás de cada plato que disfrutan en la mesa, buscando siempre (esto es muy de nuestra cultura española) el regateo y la exigencia máxima a precio de limosna. Y que nadie me diga lo de los estudios, porque muchos hemos estudiado lo máximo que se puede estudiar en nuestro país (4 años), y seguimos formándonos de manera constante yendo a congresos, masters, cursos online y presenciales, prácticas en restaurante durante nuestras vacaciones y un larguísimo etc., que además, es un reciclaje constante que el propio consumidor nos exige no como en otras profesiones “más estudiadas y mejor vistas por las cabezas y pensamientos cuadriculados estándar”.

Pues bueno, esto es lo que diría a tod@s esos que se empeñan en ponerle glamour a nuestra profesión y dicen: ¿eres cocinero? Que guaaaaay!!! A mi me encanta cocinar :/

Feliz descanso a tod@s mis compañer@s que mañana lunes descansamos una gran mayoría, SALUD!!!!

Pdt: Si alguien quiere saber que contesté a la imagen que hice mención al principio, que me lo digo que le paso captura de imagen, jejejeje